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Indíbil y Mandonio fueron la primera pareja hombresexual antes de la llegada del Imperio Romano a la Península Ibérica.
Indíbil nació en una familia humilde que solo poseía tres cabras, pero cuando él se hizo miembro de la banda del Chavo del Ocho consiguió más propiedades inmuebles, que al ser vendidas a los fenicios consiguió un prorrateo a los cinco años con un 30% TAE en intereses, lo que le convirtió en el rey del mambo y poder casarse con quien quisiera. Eligió a Mandonio, un esclavo rumano suyo y pariente de Espartaco, y juntos reinaron en lo que hoy es Lleida-Lérida.
Juntos hicieron que entrasen cientos de inversiones extranjeras, subió el PIB bruto anual y la renta per cápita de todos sus súbditos (que les querían mucho y les seguían a todas partes), así que comenzaron a tener el síndrome de nuevos ricos y se endeudaron hasta las cejas comprando Audis y Mercedes, dos chalets, una discoetca en Sitges. Pronto comenzaron a escasear los productos naturales y como todavía no habían inventado el FMI ni la emigración comenzaron a invadir a los pueblos vecinos para poder seguir manteniendo su tren de vida. Esto a su vez provocó que sus vecinos llamasen en su socorro a los romanos para que les sacasen de encima a Indíbil y su novio Mandonio (que era un mandón).
Los romanos entraron en la Península Ibérica y les dieron un bofetón a Indíbil, quien se acojonó de lo marica que era y quiso llamar a Mandonio para que le proteja, pero éste estaba en Sitges... y no pudo ir, así que todo quedó en nada y los romanos volvieron por donde habían venido.
Cuando Mandonio regresó al lado de su novio y descubrió lo que le habían hecho (pegado y sodomizado de tal forma que a Indíbil ahora le gustaba el sexo cañero) hizo venir a los cartaginenses prometiéndoles ayuda para derrotar a los romanos en su Guerra Mundial contra ellos.
Indíbil y Mandonio se unieron al ejército cartaginés (que siempre regresa por delante con los pies) y fueron a perder guerras a Italia. Regresaron enfermos y maltrechos, y detrás de ellos miles de legionarios romanos sedientos de sexo cañero. Los cartaginenses se fueron pa casita (Túnez) e Indíbil y Mandonio fueron violados, sodomizados, despojados y azotados. Esto convirtió a Indíbil en un adicto al sexo cañero (aún más) y como Mandonio no se lo podía dar porque había sido educado en las calasanzias, juró venganza (otra vez) pero contra los cartaginenses.
Mandonio llamó a Julio César y le prometió que le mostraría el paso secreto entre las montañas para llegar a Esparta. Los romanos volvieron y se hicieron amigos, así que Indíbil y Mandonio aprovecharon y conquistaron a sus vecinos (que eran compatriotas sin ellos saberlo, oye), Mandonio se hizo culto e hizo que se cambiaran el nombre por el de "Vittorio y Luccino", para tener más éxito en sus conquistas amorosas y poder gobernar los nuevos terrenitos conquistados sin que se les subieran a la cabeza los nacionalistas españoles.
Pero los cartaginenses volvieron a pasar por allí, los romanos huyeron/se replegaron, e Indíbil y Mandonio/Vitorio y Luccino, volvieron a hacerse amigos de los cartaginenses y les ayudaron a fundar Barcelona, participando con ellos en otra batalla, que también perdieron, así que los Romanos volvieron y para que no se las volvieran a joder cogieron a Indíbil y Mandonio y los esclavizaron, llevándoselos al Vaticano, donde se los vendieron al Papa, quien los usó como chaperos sacándoles la poca pasta que conseguían vendiendo sus cuerpos. Ambos murieron al cabo de tres meses de oficio putero al infectarse de sífilis.
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